18/3/11

Gravity... don't mean too much to me.

Ahora que ya no soy el dueño de mis días y todos ellos son iguales, recurro a eventos de la vida cotidiana para hacerlos diferenciables y añadir un poco de motivación al paso del tiempo. Si bien es algo triste desde mi propio punto de vista, imitar el comportamiento de los demás me ha resultado más útil de lo que habría esperado tiempo atrás.

I got a bulletproof heart... (8)

Sin duda, entre este desfile de días idénticos me quedo con el jueves. Después de mucho meditarlo es el día en que se emite el nuevo capítulo de The Big Bang Theory, pero aún no puedo verlo porque no lo suben a las nubes de internet hasta el día siguiente. Siempre digo que el auténtico periodo en el que se disfruta de la realización de un sueño, es el que pasa entre que sabes con certeza que se hará realidad, y el momento en el que se hace realidad. Justo después viene la cuesta abajo.

Y por si alguien se lo está preguntando... sí, el visionado de The Big Bang Theory es equiparable a la realización de un sueño. Y sí, el nivel de mis sueños ha ido bajando como los sueldos de este país.

Al final me voy a Málaga el 21, por tanto fui un poco imbécil al sacarme el abono de Marzo... pero no pensaba huir tanto tiempo de esta ciudad. También es cierto que ser yo un imbécil, es algo bueno para Josh, que perdió hoy su abono y tendrá remplazo gratis desde que me marche para el resto del mes.

Eso me recuerda aquello de que casi toda la suerte de unos es la desgracia de otros. "No, ¡hoy conseguí un vuelo de Ryanair por 0.01€!". Y a cuántos explotan para que tú consigas eso... ay. Es normal esta visión apocalíptica del mundo cuando, mientras escribo esto, comienza la guerra en Libia y Japón sigue consumiéndose, al menos, económicamente.

Y hablando de cosas apocalípticas, hoy, hablando con José, quien está sufriendo una relación absolutamente destructiva, me di cuenta del tiempo que he pasado autodestruyendo mi vida, mis sentimientos y mi personalidad. Y probablemente la huella quedará siempre, pero es momento de ser feliz. Ahora me viene a la mente un episodio de Expediente X en el que los malos malotes intentaban salvar la vida de la madre de Mulder porque "no hay nada más peligroso que un hombre que no tiene nada que perder". Llevado al mundo sentimental yo soy ese hombre peligroso sin nada que perder }:).

Entended que esté sensible. Ayer Yanyan me regaló una nueva cartera. Si bien cambiar de cartera era algo que casi se me exigía (ya que según parece algunas de mis amistades pasaban vergüenza cuando la sacaba), y yo era consciente del deterioro de mi ya ex-cartera, una parte de mí pensaba que pegándole doce tiritas más podría aguantar perfectamente hasta el 2014. Pero al final parece que no todo se arregla poniendo tiritas, y la cartera, no iba a ser una excepción.


Muchísimas gracias por la cartera, una vez más. Evidentemente la que inicialmente eligió ella era bastante más bonita y elegante, pero sólo tenía espacio para tres tarjetas. Yo tengo dieciocho de las cuales nueve son indispensables y seis de esas nueve absolutamente vitales.

Espero que paséis todos un buen finde.

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